Difundimos a continuación una nota publicada por Paula Baldo el 17 de diciembre de 2016 en el suplemento ARQ del diario Clarín.
Con 20.810 metros cuadrados de oficinas distribuidos en siete pisos, el T3 de Mineápolis es la estructura más importante construida con este material.
“Actualmente, los edificios se construyen con dos materiales: acero y hormigón. Que son muy buenos, pero son del siglo pasado”, sentencia Michael Green, un arquitecto canadiense, tenaz propulsor de la construcción con madera en altura. Para el especialista, las estructuras tradicionales demandan mucha energía y altas emisiones de gases de efecto invernadero para su producción: «El acero representa alrededor del 3 % de las emisiones y el hormigón, más del 5%», detalla.
Fotos: Ema Peter
El estudio Michael Green Architecture (MGA), con sede en Vancouver, acaba de inaugurar un edificio de siete pisos en el barrio North Loop de Mineápolis. Se trata de la estructura de madera más grande de los Estados Unidos levantada hasta el momento. Y una oportunidad para dar impulso a su cruzada: “Cuando un árbol crece en el bosque libera oxígeno, absorbe dióxido de carbono y luego, cuando muere y cae al suelo devuelve el CO2 a la atmósfera o a la tierra. Si se toma esa madera y se la destina a una construcción, con su capacidad para almacenar carbono nos proporciona una gran retención de ese elemento ya que un m3 de madera almacena una tonelada de CO2”, fundamenta.
El edificio se llama T3 por «Timber, Technology, Transit» (madera, tecnología, tránsito) y es una interpretación contemporánea del carácter de los edificios históricos de madera, ladrillo, piedra y acero construidos en su entorno, que suma servicios de última generación y buen rendimiento medioambiental, dos características fundamentales para atraer a las empresas. «T3 es respetuoso de su barrio y responde a su contexto con una volumetría simple. La forma y la articulación exterior crean un edificio tranquilo que responde y complementa los edificios históricos en lugar de llamar la atención», define el autor.
La construcción ofrece 20.810 m2 de espacio para oficinas y comercios. Más de 3.600 metros cúbicos de columnas de madera expuesta, vigas y losas, un volumen capaz de secuestrar 3.200 toneladas de CO2 a lo largo de la vida útil del edificio.
Los componentes de madera de ingeniería (sobre todo madera laminada) materializan pisos, columnas, vigas y también los muebles. Principalmente se empleó tableros de NLT (nail laminated timber) que están conformados por una serie de tablillas de madera maciza colocadas de canto uno al lado de otra.
Esta tecnología permitió erigir la estructura a una velocidad superior a los edificios de hormigón, e incluso de acero. Fue completada en sólo dos meses y medio a un promedio de 9 días por losa. En menos de 10 semanas se subieron 16.700 m2 de entramado de madera. La estructura es también más liviana que las de acero o hormigón comparables, lo que permite reducir la profundidad y la extensión de la excavación y de las fundaciones.
> Fuente: Suplemento ARQ de Clarín y FAIMA